La OMS (Organización Mundial de la Salud) define la discapacidad como “un fenómeno complejo que refleja una interacción entre las características del organismo humano y las características de la sociedad en la que vive”. El término engloba los problemas que afectan a una estructura o función corporal, a las limitaciones en la actividad y a las restricciones en la participación que estos conllevan.

Las personas con discapacidad física son aquellas que presentan una disminución importante en la capacidad de movimiento de una o varias partes del cuerpo. Puede referirse a la disminución o incoordinación del movimiento, trastornos en el tono muscular o trastornos del equilibrio. Se da cuando una persona tiene un estado físico que le impide de forma permanente e irreversible moverse con la plena funcionalidad de su sistema motriz.

DÓNDE AFECTA

La discapacidad física está relacionada con el cuerpo, miembros y órganos, en general.

  • Sistema músculo esquelético: deficiencias articulares, amputaciones…
  • Sistema nervioso: epilepsia, tetraplejia, paraplejia, esclerosis múltiple…
  • Aparato respiratorio: asma, trasplante de pulmón, fibrosis quística…
  • Sistema cardiovascular: cardiopatías, arritmias…
  • Sistema hematopoyético y sistema inmunitario: anemias, inmunodeficiencias no secundarias a infección por VIH…
  • Aparato digestivo: enfermedad del hígado, incontinencia…
  • Aparato genitourinario: deficiencias del riñón, incontinencia urinaria…
  • Sistema endocrino: hipertiroidismo, diabetes…
  • Piel y anejos: soriasis…
  • Neoplasias: tumor.

POR QUÉ

La mayor parte de la discapacidad física (más de un 80%) es sobrevenida después del nacimiento por condiciones comunes y accidentes de todo tipo (accidentes, zambullidas, etc). En menor grado estas afectaciones pueden originarse durante el embarazo, por problemas genéticos (como en el caso de la fibrosis quística) o durante el parto.

Sin embargo, otras veces, según l’observatori de la discapacitat puede aparecer como síntoma de algunas condiciones que afectan al cerebro, a la médula espinal o la propia musculatura. Algunas de las más comunes son las siguientes:

Daños cerebrales:

  • Daño Cerebral Adquirido (DCA). El DCA es una lesión repentina en el cerebro. Aparece de forma abrupta y puede presentar una gran variedad de secuelas; entre ellas, alteraciones físicas.
  • Parálisis cerebral. Se trata de una afectación crónica originada durante el desarrollo cerebral del feto o el bebé. Produce graves efectos en la motricidad, tales como la rigidez, agitación, convulsiones o incluso una parálisis completa de la musculatura.

Daños en la médula espinal:

  • Lesión en la médula espinal. Una lesión en la médula espinal se produce cuando recibe demasiada presión y/o se le corta el riego de sangre y oxígeno, y a menudo causa una discapacidad física permanente. Puede llevar a una disfunción motriz y sensorial.
  • Espina bífida. La espina bífida es una formación incompleta de la espina dorsal en el útero. Aunque el rango de síntomas es variable, en los casos graves puede conllevar discapacidades físicas como parálisis en las piernas.
  • Esclerosis múltiple. El daño de la capa de mielina que recubre la médula espinal puede ocasionar una gran diversidad de síntomas; entre ellos, la pérdida de control motriz y la disfunción del sistema locomotor.

Daños en la musculatura:

  • Distrofia muscular. Se trata de un conjunto de trastornos que conducen a la debilitación y la pérdida de masa muscular. Los síntomas pueden incluir dificultad para caminar, para respirar o tragar, restricciones en la moción conjunta y problemas en el corazón y otros órganos.

El término correcto y aceptado internacionalmente es ‘persona con discapacidad’

Está en vigor desde 2006 cuando se llevó a cabo el Convenio sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad, de la ONU y que fue ratificado en Brasil con efecto de enmienda constitucional, a través del Decreto Legislativo 186 en 2008.